martes, 2 de octubre de 2007

Vita Spericolata

A Fabio Leopardi


Recibo tu llamada.
Solo un tipo como tú llama él mismo, para decir que tuvo un accidente grave, solo tú dices que llamas para que no me angustie si alguien más avisa.
Casi te matas con esa moto, con Layla, tu moto con nombre de hembra islámica.
Siempre accidentes, la escena se repite impertérrita, tus hazañas, tus clínicas, yo.
Ayer te vi, en la cama, completamente indefenso y con una furia enorme por dentro.
La llamaste y ella no pudo venir, tenía demasiado trabajo, no había dinero, trataste de resolverle todo, maltrecho como estabas, no hubo nada que hacer.
Que rabia.
Te callaste con los ojos llenos de agua. Me observaste con tu mirada hinchada, morada, gacha, y me acordé de nuestras conversaciones interminables (a los 15). Cuanto dolor adolescente... (Vasco Rossi, cigarros, horas, compañia, certeza), estudiábamos a los poetas románticos y nos sentíamos reconocidos, aún sin estar conscientes. Imaginábamos suicidios ideales que le rindiesen tributo al heroico sufrimiento.
Probablemente ni te acuerdes...(yo creo que si).
Ya no hablamos de matarnos con nuestras propias manos, nos parece poco glamoroso, ahora buscamos métodos que dejen la posibilidad de la duda.
Me pides tu pipa. Te pongo el tabaco, sin preguntar, presiono. Fumas y cierras los ojos. Un segundo de bienestar. Te comprendo y siento que rellenaría pipas para ti por mil años. No puedes comer, te paso el terrible y blanco cereal de arroz y lo chupas con cara de desconsuelo, te entiendo de nuevo.
Me angustio pero en el fondo sonrío, porque sigues aquí, con tu dulce ironía, con tu fuerza intacta.
Siempre me leíste los poemas por dentro, antes de que los escribiera.
Siempre vas a ser tú. Mi gran amigo. Irrepetible.

5 comentarios:

Guachafitera dijo...

Leer poemas no escritos. Maravilloso vasco, maravilloso post.

Ti abbraccio

Fernando Visbal Uricoechea dijo...

Meraviglioso.

Cinzia Ricciuti dijo...

Gracias a los dos...es importante este momento.
Mucho miedo...pero mi amigo esta' mejor ahora.
Gracias por la compania...invaluable...
Cinzia

Ana dijo...

Cuánta fuerza hay en este texto.
Siento haber vivido algo parecido, sin accidente, pero ya por siempre ahi en la memoria, la insistencia ante los retos será...

Anónimo dijo...

non avevo capito come fare per scrivere e ringraziarti per queste tue favolose parole.
Si effettivamente sembra propio che da sempre cerco una vita spericolata, ma...."poi ci troveremo come le star, a bere del whisky al Roxy bar..."
Anzi, non ti ringrazio, perche tra noi il grazie non esiste, non ce ne è bisogno, è implicito in noi.
Semplicemente ti abbraccio, ed aspetto un tuo abbraccio...un altro, poi un altro, poi un altro...
Fabio