Si tu vida es agua
e hiciste de tu libro un barco,
no temas,
las sirenas nunca te convencerán.
Si tu vida es aire
e hiciste de tu cielo un pájaro,
no temas,
las nubes nunca te cubrirán.
Si tu vida es fuego
e hiciste de tu hogar una llama,
no temas,
el hielo no existirá.
Si tu vida es tierra
e hiciste de tus pies raíces,
no temas,
nada te arrasará.