martes, 17 de julio de 2007

La casualidad

Dos velorios en góndolas
Venecia querida
el robo de una idea
la ciudad escenario inerte
conversamos
Alegre la vida
regala respiraciones
esperanzas
humores
lecturas

5 comentarios:

TORO SALVAJE dijo...

Hasta los velorios me parecieron hermosos.

Besos.

Anónimo dijo...

No sé por qué pero tu post me recordó la ceremonia legendraia que realizan los vikingos cuandos fallece un miembro de su comunidad.
Besos desde Il Mare.

Verónica E. Díaz M. dijo...

La vida regalándose...

Un abrazo

MALEFICABOVARI dijo...

Tu hiciste esa casualidad real... no le eches la culpa al azar... eres tu mucha mujer para que ningún destino te maneje, fijo que provocaste cada una de las sensaciones que recogiste, fijo¡ Mucha mujer tu, muchaaaa¡¡¡

Cinzia Ricciuti dijo...

Toro querido:
esos velorios te aseguro que lo son. Todo depende del cristal con que se mire.
beso grandisimo
Siworae:
al final las cosas vienenn pareciendose, aunque siempre son distintas.
Un abrazo
Vero:
Anda de lo mas generosa la senora! te has dado cuenta, no?
que maravilla!
Abrazo regalado
Male:
Llamo casualidad a esos fenomenos rarisimos que no logro explicar. Pero claro que si, siempre las cosas pasan por algo. Definitivamente.
Me gusta eso de "mucha mujer"...creo que en este momento de mi vida no puedo pedir ser algo mejor que eso...mujer...mucha.
Beso