sábado, 24 de febrero de 2007

Otra vez las preguntas?
De nuevo la soledad?
La tristeza de los otros y la mía?
Unidas en una danza de fuego...de hielo...de sal?
De nuevo el amor que duele?
La confusión de saber sin sentir?
Querer sentirse enorme y saberse enano?
O viceversa?
Equivocarse en eso...
En todo?
No saberlo?
De nuevo?
Desequilibrarse...
La ilusión de la ilusión?
Por la ilusión?
El ruido de afuera y el silencio de adentro mirándote con sus enormes ojos de luz?
No se esconden ellos...
Como tapar al silencio si te quedaste sin voz?
Con que?

6 comentarios:

Verónica E. Díaz M. dijo...

Hola! Me encanta Dalí... La que tienes no la conocía... Y las preguntas nunca me dejan tranquila...

Saludos

Cinzia Ricciuti dijo...

Debe ser que alli esta el encanto, en que las preguntas y las repuestas que llegna a veces nos tienen siempre ocupados y fascinados.
A mi tambien me encanta Dali.
Me pase por tu blog y me gusto mucho, lo seguire visitando.
Gracias por leer el mio.
Saludos

Maria D. Torres dijo...

"Cómo tapar el silencio si te quedaste sin voz?"
Ahhhhh... qué escrito tan bueno, Cinzia. Qué triste. Pero sabemos que un día somos enanos, y después somos enormes. A veces somos de tamaño entandar!
Menos mal que puedo escribir, porque en estos días estoy sin voz!

Cinzia Ricciuti dijo...

Si, asi es, el punto es saberlo en serio, sentirlo, asumir esos cambios constantes de tamanos y de intensidades.
Asumir los viceversas!
Gracias MD

Cristian M. Piazza dijo...

Cara Cinzia,

"El día en que verdaderamente sepamos preguntar, habrá diálogo. Por ahora las preguntas nos alejan vertiginosamente de las respuestas"
Julio Cortázar

Tus preguntas llegan a la casa del diálogo.

Cristian

Cinzia Ricciuti dijo...

Yo tambien lo creo asi...
Que bueno que lo entiendas...
Cinzia